"El tiempo de la vida humana, un punto; su sustancia fluyente; su sensación, turbia; la composición del conjunto del cuerpo, fácilmente corruptible; su alma, una peonza; su fortuna, algo difícil de conjeturar; su fama, indescifrable.
En pocas palabras, todo lo que pertenece al cuerpo, un río; sueño y vapor, lo que es propio del alma; la vida, guerra y estancia en tierra extraña; la fama, póstuma, olvido.
¿Qué, pues, puede darnos compañía? Única y exclusivamente la Filosofía.
Y esta consiste en preservar el guía interior, exento de ultrajes y de daño, dueño de placeres y penas, sin hacer nada al azar, sin valerse de la mentira ni la hipocresía, al margen de lo que otro haga o deje de hacer. Más aún, aceptando lo que acontece y se le asigna como procediendo de aquel lugar de dónde el mismo ha venido. Y sobre todo, aguardando la muerte con pensamiento favorable, en la convicción de que ésta no es otra cosa que disolución de elementos de que está compuesto cada ser vivo.”
MARCO AURELIO (Meditaciones II, 17)
"Filósofos. Primeros Maestros y Entrenadores Personales de la Historia"
@VEbuenachevega